Consejos infalibles para que tus tomates duren más tiempo y mantengan su sabor

¿Quieres prolongar la frescura de tus tomates sin perder su sabor ni calidad? Aquí te compartimos trucos sencillos pero efectivos para conservarlos correctamente y aprovechar al máximo su dulzura y textura.

Los tomates son uno de los ingredientes más versátiles y apreciados en la cocina, pero su conservación puede ser un desafío si no se manejan adecuadamente. Muchas personas optan por guardarlos en el refrigerador, sin saber que esto puede afectar su sabor y textura.

Aquí te contamos cómo hacerlo correctamente y otros trucos para que duren más tiempo en tu hogar.

No al refrigerador (al principio)

El frío detiene la maduración y puede alterar el sabor y la textura del tomate. La mejor opción es guardarlos a temperatura ambiente, lejos de la luz directa del sol. Colócalos con el tallo hacia abajo para evitar que pierdan humedad rápidamente y se mantengan frescos por más tiempo.

¿Ya están maduros?

Si tus tomates están en su punto y no planeas usarlos en las próximas horas, sí puedes guardarlos en el refrigerador. Pero hazlo dentro de una bolsita de papel o en una caja con ventilación para evitar que se acumulen gases y maduren demasiado rápido. Recuerda que el frío solo es recomendable cuando están maduros y en uso inmediato.

Dales un lugar único de conservación 

Los tomates liberan etileno, una hormona que acelera la maduración de otros alimentos cercanos. Por eso, evita ponerlos junto a plátanos, paltas u otros productos que también producen esta sustancia. Mantenerlos separados ayuda a que no maduren demasiado rápido y duren más tiempo.

Si no quieres desechar tus tomates

¿Tienes muchos tomates maduros? No los dejes perder. Prepara una salsa sencilla con ajo, albahaca y aceite de oliva, y guárdala en frascos de vidrio. Así tendrás una base deliciosa lista para tus recetas, y además, prolongarás su vida útil.

Combinación con otros vegetales

Los tomates son un ingrediente que realza cualquier plato. Pruébalos con quesillo, albahaca, pepino o garbanzos. Su dulzor y acidez aportan frescura y sabor único a ensaladas, guisos y más.

Con estos trucos sencillos podrás disfrutar de tomates frescos y sabrosos por más tiempo, evitando pérdidas y conservando su intensidad natural.