Proponen estrategia de nichos de calidad para reducir dependencia de importaciones de lentejas y garbanzos

Un nuevo estudio del instituto revela que Chile importa la mayoría de lentejas y garbanzos que consume, mientras que los porotos nacionales abastecen el 50% del mercado interno, abriendo oportunidades para productos con valor agregado y identidad local.

El Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA) presentó un boletín técnico inédito que analiza el comportamiento de las importaciones y exportaciones de legumbres a nivel global y nacional, revelando una alta dependencia de importaciones en rubros como lentejas y garbanzos en el consumo nacional.

El estudio, dado a conocer durante un seminario de fortalecimiento de leguminosas de grano en la Región del Maule, propone una estrategia diferente para el sector: no competir directamente con los grandes volúmenes importados, sino avanzar hacia negocios de nicho que valoren la calidad industrial y nutricional de las legumbres chilenas.

Jorge González Urbina, investigador economista agrario de INIA y autor del boletín, explicó que las variedades de lentejas y garbanzos desarrolladas por INIA Chile responden a estos requerimientos, combinando alto potencial agronómico con atributos comerciales valorados por el mercado.

En contraste, el poroto grano -la legumbre más sembrada y consumida en Chile- presenta un panorama más favorable, ya que cerca del 50% del consumo es abastecido por producción nacional. Esto lo posiciona como un cultivo competitivo frente a los porotos importados, donde las variedades INIA han demostrado potencial para ampliar su presencia en el mercado.

Kianyon Tay Neves, investigador especialista en mejoramiento genético de leguminosas de INIA Quilamapu, destacó el desarrollo de Loica INIA, nueva variedad de poroto granado con alto potencial de rendimiento para la zona centro-sur, resistente a virosis y con excelentes características culinarias para consumo fresco y grano seco.

La publicación identifica nuevas áreas de desarrollo, como los porotos precocidos y conservados para consumo rápido, una categoría en expansión en supermercados que actualmente es abastecida mayoritariamente con materia prima importada. Las variedades nacionales clase tórtola y cimarrón podrían consolidar una oferta local con identidad y valor agregado.

La seremi de Agricultura del Maule, Claudia Ramos, vinculó esta iniciativa con la estrategia de soberanía alimentaria del gobierno del presidente Boric. "El énfasis de nuestro ministerio en cuanto a la soberanía alimentaria se traduce precisamente en acciones como la que está desarrollando INIA con el apoyo del gobierno regional, que se suma a otras herramientas como el programa de cultivos tradicionales de INDAP", señaló.

El trabajo forma parte del proyecto de transferencia FNDR-INIA, actualmente en ejecución en 10 comunas de la Región del Maule, con actividades de capacitación, aporte de semillas y acompañamiento técnico. Gianfranco Schio Peter, extensionista de INIA Raihuén, comentó que están viendo "una excelente recepción por parte de los productores" y que el proyecto "no sólo entrega tecnología, sino que también abre perspectivas para mejorar la permanencia y rentabilidadde quienes trabajan en el rubro".

La directora regional de INIA Raihuén, Carmen Gloria Morales Alcayaga, destacó que las legumbres tienen un valor estratégico no solo para la alimentación saludable, sino también para dinamizar economías territoriales con productos de calidad y con historia. El seminario fue financiado por el Gobierno Regional del Maule y se desarrolló en el Centro Regional de Investigación INIA Raihuén en Villa Alegre.