Conoce cómo aprovechar las cáscaras de frutas y verduras

Desde cáscaras para el compostaje hasta aromatizantes naturales, son múltiples los usos que se le pueden dar a las cáscaras que usualmente desechamos.

Con el creciente interés por reducir el desperdicio de alimentos y llevar un estilo de vida más sostenible, las cáscaras de frutas y verduras están cobrando protagonismo en los hogares chilenos. Aunque tradicionalmente han sido consideradas desechos, estas cáscaras son en realidad una fuente versátil de nutrientes, aromas y propiedades prácticas, que pueden aprovecharse de diversas formas, desde la cocina hasta el jardín. A continuación te contamos algunos de sus usos.

Alternativas sostenibles en el hogar

Uno de los usos más comunes de las cáscaras es en el compostaje, donde aportan nutrientes esenciales como potasio y fósforo, ayudando a mejorar la calidad del suelo. Cáscaras de plátano, papas y zanahorias se descomponen rápidamente y son ideales para enriquecer el compost de jardines y huertos urbanos.

Además, ciertas cáscaras, como las de cítricos, funcionan como repelentes naturales. Al colocar cáscaras de limón o naranja en áreas donde suelen aparecer hormigas o mosquitos, se puede alejar a estos insectos sin necesidad de pesticidas. También, al infusionar estas cáscaras en vinagre, se crea un limpiador casero natural que desinfecta superficies y deja un aroma agradable en la cocina y el baño.

Aprovechamiento de alimentos

En la cocina, las cáscaras tienen potencial en recetas saludables y snacks. Las de papa o zanahoria, por ejemplo, pueden freírse para hacer un aperitivo crujiente y nutritivo. Además, las cáscaras de frutas como manzana, naranja o limón se pueden secar para hacer infusiones. Estas tés de cáscara son ricos en antioxidantes y pueden disfrutarse calientes o fríos.

Beneficios para las plantas y el medio ambiente

El uso de cáscaras en el cuidado de plantas es otra tendencia creciente. Las cáscaras de plátano en infusión, aplicadas en el riego, aportan nutrientes que fortalecen el crecimiento y la floración, una solución ideal para quienes buscan alternativas ecológicas en el jardín.

El aprovechamiento de estos recursos ayuda a disminuir el impacto ambiental y fomenta una economía circular en los hogares. Con pequeños cambios en el manejo de residuos, cada familia puede contribuir a la sostenibilidad y maximizar el uso de sus alimentos.